Con un par y como el buen vino.

Si Enzo Bearzot, seleccionador de la selección italiana de fútbol, se hubiera dejado llevar por las críticas de la prensa y de mucha parte de los 'tifosi' italianos, por el hecho de llevar a un portero de 40 años de edad a un Mundial, probablemente hubiera cometido un error.

Y probablemente, Italia no hubiera ganado aquel Mundial de España de 1982. Aquel Mundial de Naranjito. Aquel Mundial que los nacidos después de los 90' nunca pudimos ver en directo.

¿Qué de quién hablamos? Obvio. De Dino Zoff.

Y es que los últimos diez años de su carrera como futbolista, fueron sus mejores años. Los años que le consagraron como el mejor portero italiano de todos los tiempos.

De 1942, nacido en Friulli, una región agrícola italiana de origen austro-húngaro. Inició más tarde de lo normal su carrera. En el 61' ficha por el Udinese Calcio, para luego jugar en el Montova, donde se forjó bajo los palos durante cuatro temporadas. Defendió como nunca antes lo habían hecho la portería del SSC Napoli de 1967 a 1972.

Como buen vino añejo: mejora con el tiempo.

Cuando su carrera tocaba a su fin, la 'Vecchia Signora' decidió ficharlo. Allí, en Turín, dónde tuvo su gran consagración definitiva y se retiró en 1983 empezaría a convertirse en si no el mejor, de los tres mejores porteros de la historia. Con los 'Bianconeri' ganó 5 títulos nacionales y una Copa de la Uefa.

"Tenía veteranía, sabía liderar a la defensa y sus cualidades físicas estaban complementadas con la experiencia de 20 años defendiendo redes. Bearzot acertó. Su frialdad en la portería y su experiencia le permitieron realizar un mundial magnífico.

La final ante Alemania el duelo entre el jersey gris y las camisetas blancas de los bombarderos alemanes elevó a Zoff a la categoría de leyenda. Tras recoger la Copa del Mundo de manos del Rey Juan Carlos I, Zoff se retiró." www.univision.com

Más tarde, mucho más, sería entrenador de la Juventus, cómo no. Dónde también se sumó a su palmarés una Copa de Italia y otra de la Uefa en 1990.

Posee el récord mundial de imbatibilidad a nivel de seleccionados: 1143 minutos, entre Septiembre de 1972 y Junio de 1974.

Portero con carácter, a la antigua usanza. Con dotes de mando y de peculiar estilo. Un futbolista de los que han llegado a la cima por puro trabajo y esfuerzo propios. Que pasó a la historia como uno de los grandes capitanes del fútbol que han levantado la copa del mundo junto con Franz Beckenbauer, Daniel Passarella, Diego Maradona, Lothar Mattheus, Dunga, Didier Deschamps, ...

Dino Zoff, un jugador de biblioteca y con un par para defender las redes de los mejores estadios de Europa.