Otra más de injusticia...

Otra más, ¿y cuántas quedan?

Aunque la fiscalía había pedido 14 años de prisión, los jueces condenaron finalmente a Luigi Spaccarotella, el policía que asesinó al aficionado Gabriele Sandri, con una pena de seis años de cárcel por el delito de homicidio. Después de que se leyera la sentencia en la sala, varios jóvenes prorrumpieron en gritos para protestar la sentencia, descrita por la familia de Sandri como "una vergüenza para toda Italia". Con esta sentencia los jueces no reconocen el delito original que se le imputó al policía, el de homicidio voluntario, que hubiera supuesto una pena mayor.

Gabriele Sandri se disponía a viajar a la ciudad de Milan, para ver a su equipo, la SS Lazio, que jugaba contra el Inter de Milan. El asesinato de Gabriele se produjo en un área de servicio de Arezzo, en Toscana, centro de Italia. Se encontraron un pequeño grupo de ultras de la Lazio y de la Juventus. El policía disparó dos veces su arma sobre los jóvenes. Uno de los disparos alcanzó el cuello de Gabriele, que para mas inri que encontraba en el interior del coche. Toda Roma y toda Italia se echó a la calle a protestar, cientos de disturbios contra la policía. Miles de ultras acudieron al velatorio y entierro de Gabriele Sandri.

"No apuntaba a nada ni a nadie. Estaba al menos a 200 metros de distancia. ¿Cómo habría podido hacerlo?", se defendió el policía, quien agregó que "el primer disparo fue al aire y el segundo se me escapó mientras corría, a pesar mío".

EFE "Spaccarotella, que no estuvo para la lectura del veredicto y lloró al teléfono cuando fue informado por su abogado, y afirmó que "creía en la justicia", mientras asistentes en la sala gritaron "cerdo" y "bastardo" al conocer la sentencia."¡Es una vergüenza para toda Italia! Siento vergüenza de ser italiano", declaró el padre de Gabriele, Giorgio Sandri. El alcalde de Roma, Gianni Alemanno, se declaró "profundamente insatisfecho" por la sentencia y consideró "inaceptable que se haya cambiado el cargo de asesinato por el de homicidio por imprudencia". El veredicto provocó choques entre la policía e hinchas de Lazio, cuyo presidente, Claudio Lotito, pidió "ver primero las motivaciones de la sentencia antes de adelantar algún juicio", aunque se manifestó solidario con la familia de Sandri"

¿6 años de prisión por homidicio voluntario? ... ¿Y a Santos Mirasierra querían imputarle 8 años por tirar una silla a un policía cuando se defendía de una carga policial, hechos que nunca se pudieron demostrar? Sí, serán diferentes la formas de Derecho de España y de Italia pero...

¿Siguen siendo los ultras los únicos delincuentes?

¿Es justa la justicia? La pregunta hace la respuesta.

¡¡JUSTICIA PARA LOS ULTRAS!!